Desde el 15 de junio hasta el 6 de septiembre desde las 19 horas hasta la media noche, alrededor de una veintena de auténticos artesanos aguardan a los visitantes a orillas del mar en el puerto de Jávea. Y es que regresa un verano más este mercadillo en el que prima la calidad y autenticidad, que vuelve a organizar la asociación Amata, defensora de los artesanos.
Este año podrán encontrarse bolsos y cinturones de cuero; cerámica; muñecos, marionetas y juguetes; joyería de diseño propio en plata, macramé, alpaca o cerámica; ropa pintada a mano; incluso esculturas, acuarelas y pinturas. Varios artesanos montarán una mesa de trabajo al lado de su puesto, y todos traen sus herramientas para poder personalizar sus productos o adaptarlos a las preferencias de sus clientes, y además realizar pedidos especiales.
Amata se fundó en el 1998 y a lo largo de los años ha seguido fiel a su filosofía de que los artesanos sólo pueden sobrevivir si ofrecen productos de calidad, hechos con sus propias manos. Sus ferias son un punto de encuentro entre el público que busca auténtica artesanía y los artesanos que la producen. Algunos artesanos de la zona vienen todo el verano para vender sus creaciones. Otros se acercan desde otros puntos de la península, para pasar unas semanas con la familia en la playa y por las tardes montar su puesto en el Paseo Marítimo del Puerto. De esta manera Amata garantiza una feria viva y variada en la que se pueden encontrar productos originales y de calidad.
La feria es un motivo más para visitar el barrio del puerto de Xàbia, que ya tiene mucho que ofrecer: el mismo puerto con su lonja, la iglesia modernista de la Virgen de Loreto en forma de un barco, las tiendas y un sinfín de terrazas para tomar un refresco, comer o cenar a orillas del mar. A partir del 15 de junio los artesanos estarán todas las noches hasta el 6 de septiembre (excepto el 2 de septiembre que no estará), de las 7 de la tarde hasta (pasado) medianoche. Y de vez en cuando la feria estará animada por música en vivo.